miércoles, septiembre 03, 2008

Sorpresas 2

No, no, ¿no les digo? Hoy me apareció un nuevo admirador. Una amiga le dio mi número telefónico y resulta que... hace un año visitó un día mi ex lugar de trabajo y me vio y -dice- quedó impactado ante mi belleza (uuff!). Ahora que ya trabaja ahí, pensó que me vería pero resulta que yo ya no trabajo ahí.
Entonces me llamó por teléfono, nervioso y feliz. Me describió los segundos en que nos topamos aquel día: cómo iba vestida, mi cabello, mi estatura, mi elegancia (según él).
Me dice que no pensó en que podría volverme a ver, y ahora que ya tenemos una cita, no cabe de felicidad. Lo oigo totalmente emocionado. Tanto que no sé si reír o preocuparme. ¡Pero me encantó! ¿A quién no le va a encantar que alguien se ponga tan feliz por una cita contigo? Wow. Creo recordarlo. Es guapo. Y me parece que solterito... ¡por fin uno no prohibido!
Los otros admiradores ahí siguen... haciendo su lucha cada día. Quien me pone muy nerviosa es el amigo del ex... se me antoja mucho. Quizá algún día termine por hacer a un lado esta culpa y me lance a, simplemente, ¡vivir!
Lo dicho: ¡lo que me pasa en esta edad caray!